PHNOM PENH – SIEM REAP – ANGKOR (CAMBOYA) 21-24 MARZO

Ya por lo que uno ve por la ventanilla del autobús se da cuenta que Camboya es un país mucho más pobre que sus vecinos, y eso que antaño eran dueños y señores de parte de su territorio. Un país en el que también se dieron con saña entre ellos durante la década de los 70 y 80.
Phnom Penh capital, hola y adiós. Llegamos a las 15 hs de Saigón con los calores de la muerte. Es inevitable, que cuando sales de un país en donde te llevas una impresión de haber visto algo diferente, bonito, limpio, con una identidad muy suya, no barrido por los usos y costumbres del consumismo occidental y con una comida excelente, el entrar en otro, en donde no hay aceras porque directamente los coches las utilizan de aparcamiento, por ende hay 25 millones de gorrillas, en donde los edificios son “de estilo colonial” según las guías, “de estilo penitenciario” según nosotros, porque están que se caen y en donde las cosas son más caras, pues lo más lógico es que no le demos muchas oportunidades, aún así y todo paseamos la ciudad toda la tarde noche y toda la mañana siguiente, que con nuestro ritmo, nos es más que suficiente para tomarle el pulso, y el encanto que tiene ver de nuevo a todo el mundo en la calle, esta vez se licuó con el agua que perdimos paseándolas.

Phnom Penh– Phompheñitas

Siem Riep es el supermercado para los millones de turistas que venimos a ver los templos de Angkor.
Y Angkor Wat y los tropecientos mil templos que hay alrededor, es más o menos lo que ha pasado en España con el ladrillo estos últimos años, pero aquí con la piedra. Una animalada de ruinas y niños vendiéndote piñas y postcards-you-buy-me-something-sir, no pueden con tanta arte. Hasta los radios de las ruedas de los carros de los relieves llevan florituras, la de cincel y martillo que hay, como para no conmocionar al más Rodin.

La guerra de las Galaxias– Raíces y Rocas

Ver templos a 40 grados, no es lo más aconsejable que se puede hacer; los turistas, (que somos todos), porque me hace gracia que en todos los blogs, la mayoría pecamos de místicos y decimos que hay mucho turista, mucha yanki estropea paisajes o mucho ponja toca clicks en estos points-puntos de encuentro, como si nosotros fuéramos arqueólogos de la BBC, en fin... que con ver un par de templos, ya te metes semejante atracón de arte e historia y piedra, que difícilmente, por lo menos en nuestro caso, el empacho te deja saborear. Pero ya se sabe, hay mucho que ver y en poco tiempo.

GOYA Y LUCIENTES
Por ello, hay que tomárselo con mucha calma y con mucha agua. Un día nos levantamos a las 5 y fuimos en bici los 6 km desde el hotel, para ver amanecer, pero llegamos ya con luz, pedaleando recorrimos varios que estaban en una distancia prudente, para la que estaba cayendo. Al día siguiente, fuimos en tuc tuc a ver otros más apartados y tranquilos. Raíces que se derriten sobre piedras, churretes de piedra conformando torres..años y años de miles y miles, de dar golpe, pulir golpe, recibir látigo: asombroso.

Raíces - Tem,pladitos

El tercer día, en tuc tuc, fuimos a ver salir la luz, esta vez sí.

Angkor y una semicorchea - Amanecidos

Durmiendo te espero - Buen trabajo
De nuevo vidas en peligro, en los dos últimos kms de tuc tuc nos dimos cuenta que el perno que hacía las veces de sujeta carro a moto, no se había salido de milagro, menos mal que no hay enganche que resista la fuerza humana.

Enganche - Tela